En mi vida profesional y personal, me he encontrado con mucha gente joven (ya hablo de ellos como si no fuera conmigo, esto será otro post.. ), que nada más incorporarse al mundo laboral lo quieren todo, sin ni siquiera haber empezado a trabajar en serio. Ven que hay puestos reconocidos y no entienden porqué ellos no lo están, y simplemente hace días que firmaron el contrato. Esta sensación se les alarga, y crea una frustración en ellos que hacen que no sean nada productivos, ya que están más preocupados de ser valorados que de valer. También me he encontrado con quienes trabajan desde el primer día como si la vida les fuera en ello, y sin embargo, siguen ahí, siendo Pepito, el gran trabajador, pero sin mayor recompensa. Estamos metidos en círculo que se llama vida, lleno de errores, sería ideal que cada uno hiciéramos una reflexión, nos situáramos en nuestra posición real de la cadena e hiciéramos lo más honesto que nos corresponde según la etapa en la que nos ha correspondido vivir. Si todos hiciéramos un acto de reflexión sincera.. ¿cambiarían las cosas? No lo sé, pero estoy convencida que si somos honestos cada uno en nuestro puesto de la jerarquía que nos ha tocado vivir, todo irá mucho mejor...
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